miércoles, 11 de junio de 2014

Inundémonos de belleza


Mis manos guardan el aplauso contagioso de los cientos de espectadores que disfrutamos de la danza y la música hace unos días en el teatro Tívoli de Barcelona, se contagiaron de tal entusiasmo y alegría que siguen vivas y con mayor fuerza expresiva. Realmente sentir, ver, compartir… la belleza de la creación, la fuerza de la acción adecuada, la vibración intensa del movimiento de los bailarines, el color luminoso, su mirada y gesto junto con los sonidos en acción-movimiento de los músicos, fue hermoso. La música unida y fundida con la danza en una misma respiración-ritmo-belleza. Los sonidos profundos, intensos, vibrantes, suaves, delicados y alegres se unieron al movimiento armonioso del sentir de los bailarines. Toda una sorpresa de interacción nueva en el espectáculo de la danza, sinergia que demuestra el talento de personas y equipos que trabajan día a día con ganas, ilusión y profesionalidad arriesgándose en entregar lo mejor de ellos en cada segundo. Irrepetible y digno de verse, una pena que sea una despedida.


Hace unos días escribía que pena lo poco que se cuida y se respeta la cultura, en este país al que pertenezco y que a veces me entristece. Una vez más, veremos alejarse a jóvenes artistas mundialmente reconocidos  para seguir sus caminos creativos e innovadores enriqueciendo la cultura en otros países. Ángel Corella nos ofreció un espectáculo digno del mejor país, digno de una cultura radiante de creatividad y novedad, es un creador nato igual que el músico Ara Malikían y “La Orquesta en el tejado”       atrevidos, alegres, y virtuosos que nos deleitaron dos horas haciendo brotar la sonrisa, la admiración el sentir hondo de que merece la pena seguir viviendo. Nos inundaron de poesía hasta el último poro, su complicidad, sus movimientos rítmicos y armoniosos, valientes y espontáneos… todo fue un regalo para recomendar y disfrutar.

“Inundémonos de belleza y el mundo cambiará” como artista y creadora es mi obligación encontrarla, sentirla y mostrarla, y mientras sigo adelante continuaré en el intento llenándome de la belleza de aquellos que no se rinden y se atreven a innovar.